Colastiné Sur: encuentro con sus vecinos, instituciones y comerciantes
15/02/2022
El Encuentro se realizó la Vecinal Colastiné Sur, y contó con una importante concurrencia de vecinos, representantes de instituciones y algunos comerciantes.
La Vecinal “Colastiné Sur” contiene en su territorio al barrio del mismo nombre, el más antiguo de la ciudad, próximo a cumplir los 360 años el 31 de diciembre del 2022. Se trata, junto con Colastiné Norte, del último barrio del Distrito de la Costa, bien hacia el este de la ciudad, a casi 10 kms. del Puente Colgante y a un poco más de 10 kms. del acceso a la ciudad de Paraná, capital de la vecina Provincia de Entre Ríos. Es un barrio plenamente costero, cuyo único límite artificial está marcado por la Ruta Nacional 168, al norte, mientras que los otros puntos cardinales delimitan en accidentes geográficos naturales como ser el Río Santa Fe y el Colastiné, el cual le da su nombre al barrio.
Nube de problemas detectados
El primer problema que plantearon los vecinos es la preocupación por la circulación de autos por encima de la defensa, que ingresan al barrio y transitan por la defensa hasta la costa del río, en donde se están construyendo edificaciones de manera irregular. Esta situación preocupa en dos sentidos: por un lado, porque no se puede circular por encima de las defensas, ya que esto las daña, y es la protección que el barrio tiene respecto de las crecidas del río. En el pasado la cuestión de las defensas era un problema que hoy ya parece solucionado, pero los vecinos advierten que es necesario cuidarlas y consideran que es gente ajena al barrio la que por allí circula con sus vehículos. En segundo lugar, esta situación preocupa en materia de seguridad. Los vecinos advierten que muchos automóviles circulan por allí a la noche, y van “hasta el fondo”, donde están estas nuevas edificaciones. Si bien nadie puede precisar de qué se trata, se especula con que sean actividades vinculadas a la venta de estupefacientes.
En materia de seguridad los vecinos realizan múltiples observaciones. Por un lado, la Vecinal afirma haber instalado tres cámaras de seguridad en el ingreso al barrio, pero estas no están monitoreadas por el 911 y simplemente graban. Otros vecinos relatan que al llamar al 911 muchas veces, por la cercanía, los atienden del 911 de Paraná. Lo mismo sucede con el 107 para el caso de la ambulancia. También los vecinos manifiestan que en el barrio no hay destacamento policial, que dependen de la Sub 4ta y la Sub 6ta y que, en general, no se ve presencia en las calles. Sin embargo, muchos coinciden en que la problemática de la inseguridad no es tan grave como en otros barrios de la ciudad. Se afirma que las modalidades delictivas son robos menores y narcomenudeo, y que en general la vida del barrio es tranquila. A pesar de esto, algunos vecinos disienten y sostienen que hay zonas del barrio donde se producen tiroteos y donde la venta de droga adquiere un volumen mayor.
En relación a la cuestión ambiental, que fue el segundo tema que se abordó, algunos vecinos plantean que se forman microbasurales detrás de las defensas. Sin embargo, el camión de recolección pasa todos los días y los martes hay recolección de ramas.
Un tema importante que se planteó es el del Centro de Salud. Por la ubicación del barrio, los vecinos tienen gran dificultad para acceder a servicios de salud por fuera del mismo. Sin embargo, la mayoría está disconforme con el funcionamiento del Centro, ya que lo hace de lunes a viernes de 8.00 hs. a 13.00 hs. y los miércoles no tiene médico. Además, el mismo es demasiado pequeño y es poco lo que se puede hacer allí. A modo de ejemplo, el Centro cuenta con la especialidad de odontología, pero no tiene lugar ni sillón para la atención, por lo que sólo sirve para consultas y los casos que requieren atención se derivan al Centro de Salud del Barrio La Guardia. En cuanto a la ambulancia, la más cercana es la de la Red Provincial de Emergencias y Traslados (“el 107”) del Barrio El Pozo, a casi 10 kms. de Colastiné. Como se dijo anteriormente, además, muchas veces al llamar al 107 la llamada se desvía a Paraná, lo que imposibilita la comunicación con el servicio. En este aspecto los vecinos se sienten muy marginados. Un vecino señaló: “Tuve que ir hasta el Hospital de Niños para hacerle un tratamiento de conducto a mi hija”. El Hospital de Niños Dr. Orlando Alassia queda 12 kms. en línea recta, pero siguiendo la traza urbana en transporte público la demora en llegar es aproximadamente de 2 hs.
Otro tema importante que se planteó es el de la titularización de las tierras. La situación es irregular. La mayoría de las familias viven allí hace ya más de 20 o 30 años, pero no tienen la titularidad. Relacionado a este problema, aunque en otro orden de cosas, se manifestó la falta de nominalización de las calles. Al respecto, los vecinos explicaron que las calles están nominadas, que el proyecto está en el Concejo Municipal pero el mismo no se ha implementado. Todas las calles llevan nombres de puertos, pero al no ser la nominalización efectiva tampoco hay señalización. En general, a la pregunta de cuál es su dirección, la mayoría de los vecinos responde “Colastiné Sur”.
En cuanto a los servicios, la cuestión del agua merece un párrafo aparte. Colastiné Sur es un barrio que históricamente careció de agua potable corriente, aun estando a 200 mts. del río, como señalan muchos vecinos. Al respecto, hay un aceitado sistema de distribución de agua potable a través de camiones cisterna, que dejan 1000 lts. de agua por familia cada día y medio. Para ello, cada familia tiene en la puerta de sus casas un tanque de dicha capacidad o dos 500 lts. Los tanques están numerados y cada camión tiene asignado por dónde debe pasar y a quién le debe dejar. Sin embargo, el sistema no está exento de problemas. Hay algunas instituciones que manifiestan que no siempre reciben el agua, y hay vecinos que expresan que si los tanques están muy elevados se necesita un camión con bomba para cargarlos, y solo hay uno que la tiene.
Más allá de este sistema, el Municipio está llevando adelante una obra para proveer a Colastiné Sur de agua potable. Dicha obra consta de tres etapas, que son: 1. tendido de cañerías; 2. instalación de los pies para el tanque de elevación; 3. construcción de la planta. Según los vecinos, la etapa 1. ya está finalizada y la 2. y 3. se encuentran en ejecución. Las autoridades habrían informado que para marzo de 2022 la obra estaría completa. Lo que se desconoce es quién estará a cargo del servicio una vez completada la obra. Al parecer, Aguas Santafesinas no se haría cargo, por lo que quedaría como servicio municipal o a cargo de alguna cooperativa, posiblemente de la vecina ciudad Rincón.
En cuanto al resto de los servicios, habiendo ya hablado de la recolección de residuos y del agua, el barrio cuenta con muchas calles sin asfalto, que alternan entre el ripio y la tierra. Hay servicio de luz eléctrica, y la iluminación pública es irregular, habiendo zonas del barrio donde la luminaria no funciona. Según un vecino, “hay zonas donde hace años no se cambia un foco”. El barrio no tiene gas natural y la conectividad la provee la empresa de cable de Rincón, a un precio – según los vecinos – de $3.800 por Internet y cable. El servicio más alto de Internet es de 8 MB. Un tema importante que plantearon los vecinos es que el barrio no tiene sala de velatorios.
Otro de los grandes temas es del transporte. A Colastiné Sur solo llega la Línea 2. Antes, cuentan los vecinos, además de la Línea 2 era posible tomar el ETACER que venía de Paraná, pero ahora ya no porque no se puede viajar parados. Además, “el 2 entra hasta la bajada”, cuando antes recorría el barrio y “llegaba hasta el fondo”. Los vecinos aducen que cuenta con muy mala frecuencia y que el primero es a las 6 hs. de la mañana y el último llega a las 21 hs., el cual ya no lleva pasajeros para Santa Fe. Por lo tanto, en esa franja horaria no hay movilidad en transporte público desde el barrio.
En cuanto a la educación, el barrio cuenta solamente con una escuela primaria la cual, según los vecinos, es plurigrado. Al respecto los vecinos manifestaron mucha disconformidad y señalan la necesidad de mejorar la oferta educativa en el barrio y de que haya una secundaria. También indican que hay problemas en relación a la cuestión electoral, ya que teniendo una escuela en el barrio muchos tienen que irse a votar a La Guardia, y viceversa.
Finalmente, los vecinos manifestaron que más allá de las actividades de la Vecinal y de la presencia del Club Caza y Pesca, el barrio no cuenta con espacios verdes cuidados, con lugares para practicar deportes ni con oferta cultural. Señalan que, para jugar al fútbol, por ejemplo, tienen que ir hasta el Club de El Pozo. Un vecino opinó que sería bueno “contratar profesores jóvenes de educación física que enseñen deportes”. Al respecto, hay una cancha de fútbol en el barrio que necesita mantenimiento, que antes era mantenida por una cuadrilla y que ahora depende de los vecinos. La misma cuenta con iluminación, a pesar de que la fuente es provista también por los vecinos.