Santa Fe 450: Reunión con vecinos, comerciantes e Instituciones de vecinal Barrio Chalet

11/04/2023

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La Vecinal “Barrio Chalet”, como su nombre lo indica, corresponde a dicho barrio, y se ubica en la zona suroeste de la ciudad de Santa Fe. Es, de hecho, el último barrio al suroeste antes de la Circunvalación Oeste.

Se trata de un barrio pequeño, pintoresco y populoso. En el triángulo que conforman las calles Roberto Arlt, Roque Saénz Peña y la Circunvalación hay una especie de centro cívico, porque allí funciona el Centro de Salud. La Vecinal, que tiene un playón deportivo, una radio y dos instituciones educativas, un playón deportivo más y el jardín municipal. Otra institución importante del barrio es la Cuasi Parroquia “San José Obrero”.

El encuentro se realizó en la Asociación Vecinal “Barrio Chalet”. La reunión contó con la participación de representantes vecinales y una nutrida convocatoria de vecinos. Por parte de nuestra fundación asistió el profesor Pedro Medei.

El programa Santa Fe 450 busca dejarle un regalo a nuestra capital por su 450 aniversario:un libro diagnóstico para pensar el futuro de los y las santafesinas ¡Gracias a todos los que nos acompañaron en cada una de las más de 70 reuniones que realizamos desde 2021!

Ficha territorial

Ubicación
Límites

Norte: Olegarios
Sur: Intendente Irigoyen
Este: Dr. Zavalla
Oeste: Circunvalación Oeste

Nube de problemas detectados

Buena parte de los principales problemas que apuntan los vecinos tienen que ver con la infraestructura del barrio. Por ejemplo, hay calles sin asfaltar y casi nunca se les hace un mejorado. Entre ellas, Roberto Arlt, la calle de la Vecinal y el centro cívico que mencionábamos en la introducción.

Vinculado a las calles está también el problema de los desagües, que en Chalet es particularmente grave porque el barrio se encuentra con un pronunciado desnivel respecto de los barrios adyacentes. Esto puede observarse a simple vista desde la rotonda de Av. J. J. Paso y Dr. Zavalla, donde se cómo baja la calle J. J. Paso para ingresar al barrio. Los vecinos advierten que los desagües no tienen mantenimiento. A esto se suma que la recolección de pastos y ramas se hace de manera esporádica, por lo que muchas veces son estos elementos los que contribuyen a tapar los desagües. Por otro lado, afirman que hay problemas con las bombas de extracción. Entre ellos, afirman que la Estación de Bombeo 0 de Barrio Centenario no está un funcionamiento. Y, por otro lado, que ha habido una reducción del personal que trabaja en las estaciones. Afirman que antes había personal las 24 hs., mientras que ahora solo hay 6 hs. diarias y 24 hs. los fines de semana. Sostienen que además es una sola persona destinada a varias estaciones. El resultado es que cuando llueve el barrio se inunda considerablemente, al punto de que los vecinos tienen agua adentro de las propias casas. Esto les preocupa particularmente en esta época, sabiendo que se viene una temporada de lluvias. En algunos casos, con el J. J. Paso y Santiago de Chile, cuando llueve se forma una especie de laguna que demora al menos tres días en desagotar.

En materia de luminarias el barrio está bien. Si bien les habían prometido las luces LED (y de hecho algunas calles las tienen), en general el barrio está bien iluminado. También hay un servicio regular de recolección de residuos, pero esto no evita la formación de microbasurales que los vecinos denominan “históricos”. Por ejemplo, en Uruguay y Roque Saénz Peña, o en Uruguay y Juan Díaz de Solís.

Un problema importante que se plantea es en relación al transporte público. En algún momento el barrio contó con cinco líneas: 2, 4, 5, 10 y 14. Hoy tiene solo una, que es la Línea 4. Las últimas en ser retiradas fueron la Línea 2, y la 5, en ese orden. Hay mucha disconformidad de los vecinos con estos cambios, porque la Línea 4 no lleva ni al Hospital de Niños, ni al Cullen, ni al Nuevo Iturraspe. Vincula al barrio con el centro cívico y la zona de Aristóbulo del Valle, y lo transita solo por la calle J. J. Paso. Además, sacaron paradas (porque el colectivo debe parar cada dos cuadras), lo que expone a los vecinos a mayor inseguridad. Y tampoco tiene buena frecuencia, ya que afirman que las demoras son de entre 30’ y 45’. Además, los colectivos circulan hasta las 21 hs. y el ingreso de taxis y remises es aleatorio. El malestar con los cambios en el transporte realizados aproximadamente en el período 2021 – 2023 es común a todos los barrios del suroeste. En concreto, esto se planteo también en las reuniones de FONAVI San Jerónimo, Centenario y San Lorenzo.

En general hay un gran malestar con la Municipalidad. La Vecinal plantea que desde el Municipio han cortado todo tipo de comunicación desde hace al menos tres años. Esto es preocupante, considerando que – por ejemplo – la Delegación Suroeste se encuentra en la “puerta” del barrio, esto es, en la rotonda de la cancha de Colón. Aseguran que tienen “encarpetados” reclamos con más de dos años de antigüedad. Todo lo planteado en los párrafos precedentes ha sido comunicado por los medios que corresponde, sin respuesta. También hay una iniciativa de la Vecinal vinculada a algunas intervenciones urbanísticas básicas que permitan conectar los dos playones con la Vecinal y la parte trasera del Centro de Salud, colocando algunos juegos y elementos para hacer ejercicio, más luminarias, y de esta manera armar una especie de parque en un lugar muy propicio para ello. Se trata de una potencialidad inexplotada en la zona más concurrida del barrio. La Vecinal incluso hasta tiene pileta, y tiene una colonia de vacaciones que dependía de la Municipalidad hasta que esta se desligó de esa responsabilidad.

En otro orden de cosas, el barrio tiene problemas con el suministro eléctrico y del agua. En cuanto al primero, hay muchas zonas con baja tensión. Una vecina cuenta que tiene un reclamo iniciado desde el año 2007 – hace 15 años ya – para que haya una extensión de 100 mts. de cable preensamblado hacia la triple intersección entre J. J. Paso, Jujuy y Estrada, de manera tal que la gente que vive allí pueda tener medidor comunitario, “porque quieren pagar”. En relación al agua, los vecinos afirman que durante casi todo el día el agua que sale no es de calidad. Por lo tanto, o juntan a la noche o compran. Un vecino cuenta que compra agua a $700 el bidón de 20 lts., y que consume cuatro bidones por semana, porque el agua que sale no se puede usar para nada. En otros casos, la presión es tan poca o nula, que habría que decir que, en términos prácticos, los vecinos no tienen agua.

En relación a la seguridad, el barrio depende de la Comisaría 2da y de la Sub 10ma. La primera se ubica en Barrio Sur y la otra en San Lorenzo, por lo que el barrio no tiene presencia policial fija. Desde la Vecinal cuentan que han ofrecido al Ministerio de Seguridad las instalaciones de la misma para radicar allí un destacamento, pero no han recibido respuesta. En el barrio se observa muy poco patrullaje, y de las 20.00 hs. en adelante directamente no hay. Cuando oscurece se pone particularmente peligroso, son frecuentes los asaltos, los arrebatos y los robos desde motos (“motochorros”). Los vecinos saben que son personas del propio barrio o de barrios aledaños. Un problema particularmente importante es el de los tiroteos, que se dan especialmente en la zona oeste del barrio. Según los vecinos, todas las noches entre las 22.00 hs. y las 3.00 hs. se escuchan tiros. La razón es el enfrentamiento entre bandas, situación directamente vinculada a la venta y consumo de drogas, que según los vecinos “ha crecido de manera exponencial”. También las instituciones están muy expuestas a los robos y al vandalismo. A la Cuasi Parroquia “San José Obrero” le han robado varias veces en los últimos meses.

En cuanto al Centro de Salud, los vecinos se manifiestan muy disconformes. A pesar de que funciona de lunes a vieres de 7.00 hs. a 18.00 hs., “dan 5 turnos por día”, afirman. Lamentan que esto sea así porque dicen que el Centro tiene todo para funcionar bien, por ejemplo, está bien equipado para la atención odontológica. Sin embargo, en el mejor de los casos funciona con médicos generalistas. Como en buena parte de la ciudad, pediatras no hay. Los vecinos también denuncian un incumplimiento en los horarios, ya que si bien el período de trabajo establecido es de 7.00 hs. a 18.00 hs., de hecho la atención comienza a las 8.00 hs. y termina a las 17.00 hs. Afirman que para conseguir turno hay que ir a las 6.00 hs.

En materia educativa el barrio tiene un Jardín Municipal, y tiene una Primara para Adultos y un E.E.M.P.A. que funcionan en las instalaciones de la Vecinal. No hay Primaria ni Secundaria para niños y jóvenes, pero en los barrios aledaños sí hay oferta educativa y allí van los chicos y las chicas.

A excepción del espacio de los playones detrás de la Vecinal, el barrio no tiene espacios verdes. Según los vecinos estos espacios estaban proyectados, pero fueron usurpados. En cuanto a oferta deportiva y cultural, la Vecinal tiene una vida muy intensa. Abre a las 7.30 hs. y cierra 21.30 hs. En ese espacio, además de comedor – donde se atiende a 250 personas-, en la Vecinal hay vóley, básquet y fútbol. Además, hay talleres de música, cine comunitario y apoyo escolar. También está la Radio Chalet, que pertenece a la Vecinal y que ha renovado sus instalaciones. La misma tiene programación durante casi todo el día, y transmite los partidos de Colón y Unión.

Por otra parte, hay buena relación entre las instituciones del barrio. La Vecinal, por ejemplo, presta su espacio para actividades de la parroquia, e integra el Movimiento de Organizaciones Barriales (M.O.B.).